Mikel Arteta admite que hasta ahora está disfrutando de la presión que supone ser el entrenador del Arsenal desde su nombramiento.
Mikel Arteta acepta la presión que conlleva su trabajo como entrenador de los ‘Gunners’.
El Arsenal afronta el jueves por la noche un partido imprescindible contra el Benfica en la vuelta de la Europa League.
Los ‘Gunners’ marcaron un gol fuera de casa en el partido de ida, gracias a Bukayo Saka. Pero dado que el partido «en casa» de esta noche se disputa en el estadio del Olympiacos, esa ventaja parece muy escasa.
«Creo que esta eliminación es diferente», dijo Arteta en la web oficial del club.
«El gol fuera de casa siempre es importante, pero en este contexto, no creo que sea tan relevante».
«Nos tomamos el partido como si aún estuviera todo por jugar. Es la segunda parte del partido y tenemos que ir a intentar ganarlo».
La presión recae sobre Arteta esta noche, pero al menos puede consolarse con el hecho de que en estas situaciones parece prosperar.
Lo hizo en las victorias del Arsenal en la semifinal y la final de la FA Cup de la temporada pasada (contra el Manchester City y el Chelsea, respectivamente). También hizo lo mismo en la Community Shield contra el Liverpool y contra el Chelsea en diciembre, cuando la presión sobre él para mantener su puesto aumentaba.
Una vez más, la presión recae sobre Arteta, que está disfrutando de ella.
«Cuando juegas en estas competiciones y estos partidos, finales también, es la presión que quieres», añadió.
«Es mucho mejor tener la presión de ganar que la de no perder. Me gusta mucho la presión de ganar y para estar aquí y representar a este club tienes que estar preparado para hacerlo. Si no es así, no debes estar aquí».